Anoche fui a divertirme a Oropesa, pues no podÃa tener ninguna ambición después de un verano dedicado al corretear turÃstico y hacer salidas relajadas para mantener el peso.
Pero al final somos como el perro de Paulov y cuando determinadas condiciones se combinan en tu mente y en tu cuerpo y haces cosas que pensabas que en esos momentos no podrÃas.
Y bueno, en el 10K nocturno de Oropesa, me dediqué a divertirme, saliendo desde atrás, tranquilo, mejorando posiciones hasta que ya me vi en solitario disputando el puesto con corredores mano a mano ya con muchas más tensión.
Al final, llegué en 39 minutos y pico y el primero en mi categorÃa de edad.
No tenÃa muchas ganas de competir en estos últimos meses, pero al final acabamos haciendo lo que más nos gusta.
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